El día internacional del teatro y las ambulancias
Me realizaron una entrevista en la Radio de la Universidad de Salamanca. La última vez que los había visitado había sido cuando el estudio estaba en el subsuelo del Aulario de la Plaza de San Isidro, pero hace ya tiempo ya que se han mudado al coqueto Edificio I+D+i.
Una buena entrevista te pone en situación de reflexionar sobre los grados de importancia de cada uno de los proyectos que has realizado y de los que tienes en curso. Es verdad también que las entrevistas suelen seguir cursos similares, por lo que estaba preparado para que me preguntaran sobre la Escuela, la Compañía y por supuesto sobre el Día Internacional del Teatro, que es el 27 de marzo. Cada año una persona reconocida del mundo del teatro realiza un Discurso para leer en todas las salas del mundo y siempre recuerdo el que escribió Augusto Boal unos meses antes de fallecer. El director brasileño puso el foco sobre lo que consideraba que era una de las principales funciones del teatro, que no es otra cosa que el hacer conscientes a los espectadores del propio espectáculo del que ellos mismos son actores y actrices en su día a día.
Mientras caminaba desde la Escuela de Teatro…
…en el barrio de Garrido hasta la radio, que está por la zona de los Hospitales, me dio tiempo a pensar sobre todo esto.
En un cierto momento pasó un ambulancia con su estridente sirena, que provocaba que con gran pompa los coches se abrieran a su paso como en un ballet mecanizado. Por la costumbre y las preocupaciones cotidianas, es probable que poca gente prestara atención a que dentro de esa ambulancia se desarrollaba un drama de vida o muerte. Muchas personas al día siguiente estarán llorando o agradeciendo según se haya podido salvar o no el infortunado pasajero de aquella ambulancia. A los mandos del vehículo, un trabajador que según informa la prensa, es probable que tuviese como preocupación añadida la amenaza de recorte de sus derechos laborales que lo llevará muy pronto a la huelga. William Blake se preguntaba en forma de poema si “¿Puedo observar el dolor de alguien sin sentir con él tristeza?”.
¿Qué es el teatro?
Sobre todo esto pensaba al llegar a la entrevista y cuando vino la consabida pregunta sobre el sentido del teatro pensé en tres respuestas: una como artista, otra como profesor de teatro y la última como gestor cultural.
Como artista sólo tengo una respuesta personal y completamente inútil socialmente, ya que para mí el teatro es una necesidad expresiva comparable con el amor, con los virus o con las drogas. Un cóctel algo alucinado que al caminar por Avenida Mirat me hacía mezclar la muerte cotidiana con el Teatro del Oprimido de Boal, el poeta maldito Blake, un ballet de coches y el sindicato de conductores de ambulancias.
Como profesor de teatro tenía una respuesta más práctica que habla de que el teatro es un espacio de obligada convivencia física entre performers y espectadores.
Pero como gestor cultural no puedo dejar de ver al teatro como un espacio abierto que hay que cuidar, regar y renovar constantemente para dar cabida a todas las definiciones y sensibilidades de todo aquel que quiera como dijo Lorca: “destruir el teatro o vivir en el teatro ¡no vale silbar desde las ventanas!”.
Feliz día Internacional del Teatro para todas.